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Vuelve al blog el tema de las elecciones de 2011. Como lo indica su nombre, este blog fue creado para expresar nuestra opinión sobre las peripecias vinculadas al relevo (me juego) de NK y Cía el año que viene. Y ahora que la arena política se enfrió un poco tras un verano bien hot, vale la pena hacer un nuevo relevamiento del actual posicionamiento de los políticos estrella en su carrera por algún cargo importante en 2011.

Cleto: Empiezo, cómo no, por el (ex?) candidato número 1 a ocupar el cargo que hoy ostenta su compañera de fórmula de 2007. El pobre Cobos ha tenido un verano nefasto que posiblemente le haya costado no sólo la Presidencia, sino hasta la candidatura, al menos dentro de la estructura de la UCR.
Este verano se enterró bastante. Manejó muy mal el tema de las reservas y del despido de Redrado (quedó a mitad de camino entre oficialismo y oposición, así que le pegaron de todos lados) y hace poco hizo un papelón en la votación de la coparticipación de la ley del cheque. Cuanta más exposición tiene, más claro queda que es un incapaz. Así y todo, si emerge como el candidato radical puede ser Presidente.

Néstor: Band on the run. Posiblemente, su designación como Secretario General de UNASUR –y el empeño puesto para conseguir ese cargo- sea la demostración más contundente de que NK no piensa competir –al menos, no seriamente- en las elecciones de 2011. Insisto en que Néstor no tiene chances porque no puede ganar en primera vuelta y porque hoy por hoy pierde un ballotage hasta con De la Rúa, y estoy seguro de que él lo sabe. Los planes son otros, seguramente.

Lole: En el limbo. En los últimos meses, fiel a su estilo, no hizo nada para bajar ni subir en las encuestas. Mantiene su perfil bajo e indeciso. Yo creo que no va a ser candidato, pero quien sabe. Si compite, es número puesto para la segunda vuelta. El perfil moderado es un buen activo tras tantos años de presidentes histéricos. Y es del PJ, lo que le da un buen piso de votos. Pero, reitero, sigue tras bambalinas.

Lilita: Con su discurso monotemático (“son todos chorros”) mantiene sus 15 puntos históricos. El problema que tiene Carrió es que a partir de diciembre ese discurso se ha propagado un poco al resto de la oposición, y eso le sacó lugar. Hasta hace algunos meses, Carrió era, con todos sus defectos, la cara más visible de la oposición. Hoy nos encontramos a tipos como Morales o Rodríguez Saá, que hacen una pésima oposición pero que tienen más exposición mediática que Lilita. Además, no aprovechó estos años para hacerse una imagen más ejecutiva, que es lo que le falta. La gente no la ve como Presidente. Ya saben que desde este blog la bancamos a Lilita por su coherencia, pero hoy está más para apuntalar candidaturas ajenas que para aspirar al máximo cargo ejecutivo. Además, yo la quiero en el Congreso.

Scioli: Está jugando bien su partido. Se mantiene en el barco oficialista, lo que le garantiza efectivo para que no se le incendie la provincia, pero evitar quedar etiquetado como ultra K. Es raro que Néstor le perdone ese “alejamiento” público, lo que me hace pensar que es algo consensuado. Scioli es el último recurso de NK para conservar el poder, y probablemente haya entendido que el ex motonauta no puede mostrarse muy cerca suyo si quiere tener alguna chance en 2011. En mi opinión, too late.

Macri: Otro que tuvo un verano de pesadilla. Mauricio está definitivamente out de la carrera presidencial. La tragicomedia en torno al Ministerio de Educación (con el sucesivo nombramiento de ministros fachos) y el caso de espionaje (mezclado también con nombramiento de funcionarios fachos) sepultaron las pocas esperanzas del niño Macri por competir con seriedad por ser Presidente. Ahora juega a que va a ser candidato en 2011 para ganar prensa y para crearse la imagen de presidenciable que a los porteños tanto les gusta (recordar que De la Rúa, Ibarra y el propio Macri siempre reconocieron que usaban a la ciudad como trampolín a la presidencia… el primero lamentablemente lo logró, el segundo no y no sólo por Cromañon y el tercero ya veremos, pero no creo), pero sabe que en 2011 sólo puede aspirar a ser reelecto en la Ciudad. Ahí deberá hacer una mucho mejor gestión para pensar en 2015. Aunque para esa época –danger- puede haber perdido el poco sex appeal que le queda.

De Narváez: Cuál Chuck Norris (grosso), anda desaparecido en acción. Según nos enteramos diariamente por su activa cuenta de twitter, anda recorriendo el país para sumar porotos. No va a ser candidato a Presidente (no puede, por más que insista), pero sí a Gobernador de Buenos Aires. Y tiene chances, aunque usted no lo crea. A De Narváez me lo imagino apuntalando desde la provincia la candidatura más fuerte que se presente desde el peronismo no K.

Alfonsín: Es el tapado que viene de atropellada. Es en buena medida un invento de los medios y de la propia UCR, que ve con espanto cómo se desinfla Cleto. Tiene un par de cosas a favor; el apellido en primerísimo lugar, un discurso educado, medido y legalista, muy poca imagen negativa, pocos muertos que tirarle en una campaña sucia (porque tiene poca historia política, y porque hay que tener huevos para meterse con el apellido Alfonsín), podría tener el acompañamiento del socialismo y de Carrió reeditando el ACyS (ni a palos esos acompañan a Cleto) y, a no desestimar este punto, el apoyo del Grupo Clarín, que tiene experiencia en esto de elegir presidentes (do you remember De la Rúa and Kirchner?). Creo que le costaría más ganar la interna radical que llegar a Presidente si es que finalmente se impone en las primarias. Es que la UCR tiene toda la pinta de ser el próximo partido gobernante, incluso si compite Reutemann.

Duhalde: Insisto en que no va a ser candidato. Tras unas primeras semanas de pre candidato a toda orquesta, gradualmente desapareció de los medios. Creo que alguien le hizo entender que, en este momento, recibir el apoyo de Duhalde es peor que recibir el abrazo de un leproso.

Solá: Perdió mucho terreno en este verano, a manos de la oposición más dura. Se habla de una alianza con Carrió, aunque si Lilita va con el ACyS Felipe se quedará solo. Es una pena, es uno de los pocos pejotistas que me cae bien, pero tuvo la mala suerte de buscarse los amigos equivocados (De Narváez y Macri, claro, que están cada uno en la suya). Puede tener algún lugar en una candidatura del peronismo no K si se baja el Lole, pero no creo que como cabeza de la fórmula.

Después, hay una bolsa de candidatos de segunda y tercer línea, entre los que se puede mencionar a Binner, Das Neves, Solanas y Sanz. Para mi gusto, estos tipos están más para pelear por una gobernación y sumar votos a un candidato con chances que para competir directamente. A lo mejor Das Neves se manda, pero no creo que tenga chances en la interna del PJ. Y a nivel nacional, quien se anima a votar a otro peronista patagónico? Con uno por siglo ya estamos hechos.