Hugo “Jabba el Hutt” Moyano (a quien Cole no le gusta que llame “simio”, no se porqué) salió a marcarle la cancha al kirchnerismo. Con el apoyo de la oposición, logró ayer que se apruebe la utilización del salario mínimo, vital y móvil (SMVM) como referencia en las negociaciones salariales.
En criollo, esto quiere decir que, a partir de la reforma, el SMVM sí cumplirá el rol de salario mínimo de convenio. Hasta ahora, las convenciones colectivas tenían cláusulas que llevaban a que muchos trabajadores cobraran menos que el SMVM, al contabilizar dentro del salario cuestiones como el comedor en el trabajo, o la guardería. Es decir, se contabilizaban servicios como un sueldo implícito. Eso cambiaría con la reforma aprobada ayer.
Digo cambiaría, porque seguramente Cristina vetará la ley, presionada por las empresas, que hicieron lobby a través de Tomada.
Sin entrar en un juicio de valoración de la medida, lo que me interesa destacar es el hecho de que Moyano haya desafiado abiertamente al Gobierno, en una clara señal de no alineación incondicional de cara a 2011. No es la primera; el simio (ups, se me escapó!) ya dijo en varias oportunidades que le gustaría competir por la presidencia al año próximo. Y esta decisión de contrariar a Néstor puede ser el primer paso en esa carrera.
Creo que Moyano va a ser candidato a Presidente? No way. Simplemente está tratando de hacer una demostración de poder, de cara a las negociaciones salariales de este año. Lo que Moyano quiere, seguramente, es carta blanca para negociar un incremento salarial bien jugoso que refuerce la fidelidad de sus seguidores. Meta leña al fuego sagrado, nomás.
Probablemente porque después soy yo el que tengo que leer los comentarios injuriosos de los querido anónimos :)
ResponderEliminarUna pregunta Billy. Según escuche, el oficialismo acompaño en la votación en la cámara baja. Pero no en la alta. La pregunta es por qué?
ResponderEliminarLo otro que decís me parece razonable. Moyano está pasando facturas de su apoyo...
Let it be. Yo los contesto, tengo los fundamentals necesarios.
ResponderEliminarFrank, aparentemente fue una movida de Tomada, que bajó línea en el Senado para que no acompañen
ResponderEliminarFrank, es que lo razonable es que el oficialismo acompañara la medida; fue impulsada por Moyano y es coherente con la política de ingresos de este Gobierno. Uno puede preguntarse por la eficiencia de implantar una salario mínimo -yo estoy en contra, y creo que el crecimiento del mercado laboral informal en Argentina tiene bastante que ver con este tipo de medidas-, pero dada su existencia parece racional remover los obstáculos a su vigencia.
ResponderEliminarLo extraño fue que no la apoyara en el Senado. Lo que pasó fue que los empresarios, cuando vieron que se aprobó en Diputados, le pidieron a Tomada que saliera la ley, por el incremento del costo salarial que eso generaría. El típico lobby. A cambio, el empresariado mantiene sus protestas en voz baja. No es crítica, así funciona el mundo.