Empeñando la olla y el cucharón

Fondo del Bicentenario. Reforma del Monotributo. Responsabilidad Fiscal. Prórroga de Impuestos. Superpoderes. Despido de Redrado. ¿Qué tienen en común las últimas iniciativas de los K? La plata. Es bueno saber que el Gobierno tiene un objetivo claro; juntar plata, de donde sea y como sea. Como diría George Harrison, Don't ask me what I want it for, pero la quieren. Bah… ya sabemos para que la quieren; 2011 I’m looking at you.

Perfecto, los K quieren plata. El problema es que, por primera vez desde el glorioso día en que Néstor tomara el poder pese a las agresiones de la prensa (el golpazo del fotógrafo en la frente del pingüino más jodido de la historia fue todo un preludio de su relación con la prensa golpista), la cosa no está fácil.

A saber: Congreso opositor, economía frágil, mercados que como mínimo se ríen de nosotros y Justicia que abandona el barco oficialista son algunos de los obstáculos que los K tienen para conseguir más caja.

Por suerte, el matrimonio presidencial es gente creativa, y se inventaron el Fondo del Bicentenario, para compensar que esta vez –y que no se repita- tuvieron que hacer un Presupuesto con proyecciones realistas (no daba proyectar una caída del 2% del PIB, que es lo que necesitaban para tener el mismo sobrante de caja del que dispusieron los años anteriores).

Ahora bien, eso les alcanza? Es obvio que no. Por algo se quiere acceder a los mercados de créditos internacionales. Canje, Club de París y la casi fogosa reconciliación con el FMI (hasta que llegó el aguafiestas de Néstor y le cortó el chorro a Amado “Blejer es el nuevo presidente del Central” Boudou) son pruebas de los K andan secos.

Y como billetera mata galán (valiosa lección que les refrescó el tándem De Narváez-Tinelli), hay que conseguir plata. Y no sólo para 2010, sino también, y sobre todo, para el año que viene, donde los K van a averiguar dónde van a pasar los siguientes cuatro años: en Olivos o en el exilio.

Hay varias pistas de las alternativas que maneja el Gobierno para seguir juntándola con pala. Las enumero. No digan que no les avisé.

1) Después de que el Congreso no rechace el DNU que crea el Fondo del Bicentenario (ya tienen asegurados los votos en el Senado) van por más e impulsan una reforma de la Carta Orgánica del BCRA. El principal cambio; se libera el uso de las Reservas excedentes (what de fuck???) para financiar al Tesoro. Como las reservas excedentes son una función creciente del tipo de cambio (a mayor tipo de cambio, menos dólares se necesitan para comprar la Base Monetaria), el BCRA fuerza una devaluación del peso. No digo que va a llegar a 10 mangos como algunos, pero se va a devaluar. Pesce ya lo insinuó (leer Informe de Inflación). Como la UCR ya piensa como futuro Gobierno, puede ser que la idea no les desagrade del todo.

2) El Tesoro le empieza a colocar Letras a los bancos para financiarse. Acá hay dos opciones: o el BCRA deja de ponerles Lebacs, o lo bancos consiguen más plata. El Gobierno eligió la segunda opción. Según me han contado, los bancos no largan un peso en créditos, por pedido del Gobierno. O sea, están armando el colchón para prestarle al Estado. Para fortalecer esto seguramente subirán las tasas de interés. Esto también ya fue sugerido por Pesce, otra vez en el Informe de Inflación. Ésta opción sale con fritas.

3) Se abre el Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS)de ANSES, que se supone que tiene como objetivo preservar el valor de los fondos expropiados a los trabajadores que aportaban a las AFJP (nota al margen: eso lo hacen, por ejemplo, comprando acciones, la misma timba que la reina Cristina les condenaba). Al abrir el FGS, ANSES puede liquidar sus activos y girarle la plata al Tesoro.

Seguramente, van a intentar las tres cosas, más alguna que se les ocurra en el camino. Esperemos que sin éxito, porque después de 2011 vamos a seguir necesitando la olla y el cucharón para poder comer.