Alfonsín
Menem
Kirchner
Con tres nombres se pueden explicar tres décadas de historía política Argentina.
Al primero tardamos 20 años en reconocerle su rol vital para la vuelta de la democracia, esperando que esté al borde de la muerte para darle un justo reconocimiento.
Su muerte significó que hoy su hijo represente lo que algunos quisieramos ver un político.
Al segundo los que lo quisieron durante su gobierno hoy lo quieren en secreto. Los que lo odiaron hoy lo siguen utilizando como el ejemplo de lo que nunca quieren volver a ver en un político.
Probablemente una vez muerto los matices cambien de alguna forma.
Al tercero siempre lo critiqué pero negar que puede sentarse con los otros dos y dialogar con la misma altura que muchas veces no expresó vivo es decir mucho.
Pero se fué muy rapido, tan rápido como dejó una huella en sólo cuatro años de Gobierno donde es difícil entrarle con la crítica.
Sus años de co-gobierno acompañanando a Cristina es donde la imágen comienza a ser muy borrosa y donde los criticos como yo ponemos el acento.
Pero se fué muy rápido, tan rápido como para que nos preguntemos y ahora qué?
Supo conseguir un poder inusitado, aún superior al de Menem quien tenía poder pero sabía delegarlo y de ninguna manera comparable al de Raúl.
Se fué muy rápido, yo hubiera querido tenerlo de rival a no tenerlo, y eso también dice mucho de él.
Oh, muy acertado analísis.
ResponderEliminarAcertadamente este blog supo ir contra la corriente (o avalancha mejor dicho) y señalar los enormes defectos de la presidencia de Alfonsín cuando falleció y lo hacían heroe. También se la jugó para señalar cosas que se hicieron bien durante el gobierno de Menem cuando se lo demonizaba. Pues, ahora se sigue sosteniendo lo que se dijo sobre Kirchner.
Yo sigo creyendo que tuvimos una década donde perdimos una gran oportunidad de tener un despegue similar al de Brasil. No ser la segunda potencia de Sudamerica habla de que hicimos algo mal, con todo el respeto que merecen Chile, Uruguay, Peru, Colombia, etc...
Reconozco, como bien señala Cole, que tuvo cosas bien hechas que van a perdurar como la AUH (que también dijimos se promovía hace años desde Lilita & Cía), pero creo que su progresismo se desvirtuó en populismo. Lula, Bachelet y Tabaré balancearon progresismo con crecimiento de largo plazo (incluso Lula es visto como populista por un gran sector del Brasil) mientras que Nestor prefirió acercarse a Chavez, y no sólo en números de inflación.
En fin, no se puede hacer una crítica de un movimiento de 10 años en un comment, pero si se puede decir que marcó una decáda y va a pasar a la historia.
De todos modos, dado que los presidentes se elijen cada 4 años es bizarro que 3 presidentes sobresalgan en 30 años, uno marcando cada década. Pero para el caso en USA no vamos tan lejos con Clinton y Bush.
Gracias Roland.
ResponderEliminarYo creo que el hecho que se pueda explicar tan fácil con sólo 3 actores parte de la propia dinámica del PJ de encolumnarse siempre tras una figura fuerte que acumula poder como fueron Menem en los 90's y ahora Néstor.
Por eso no deja de ser extraña la situación actual donde no hay un líder que lo pueda reemplazar.
Ayer Beatríz Sarlo dijo algo que me pareció ilustrativo : "Los líderes carismáticos no dejan herederos".
El caso de Alfonsín en los '80 trasciende por el contexto en el cual asumió y como se comportó luego del mandato, donde se lo puede criticar (en mi familia hubo una desafiliación masiva post pacto) pero siempre con un rol más de estadista y de fuente de consulta para la generación política.
Saludos
pd: mis fuentes secretas me informan que escribís desde la tierra del norte, están en lo cierto?