
Ahora que tengo su atención, sigo.
Habiéndose terminado el Mundial, quiero divagar un poco con lo que me gustaría que pase con la Selección argentina de aquí en adelante.
Como primer punto, quiero decir que considero que hace tiempo Argentina dejó de ser una Selección grande. Esa categoría hoy sólo les cabe a Brasil, Alemania e Italia, que son los que realmente siempre están en las definiciones. No hace falta más que mirar los datos. En los últimos 5 mundiales, lo mejor de Argentina fue el 5to puesto de este Mundial. En ese lapso, Brasil jugó 3 finales y ganó 2, Italia ganó 1 de 2 finales jugadas, y Alemania llegó a una final y dos semifinales.
Hoy Argentina pertenece al segundo pelotón, integrado por países como Inglaterra, Holanda, Francia, Uruguay y, ahora, España. Países de clase media alta futbolísticamente hablando.
Recuperar el lugar que Argentina ganó en los ’80 y perdió en esta década dentro del grupo de elite requiere un trabajo serio y de largo plazo. Qué espero yo que se haga? Creo que Argentina tiene que elegir una forma de jugar, y replicar ese estilo en todas las categorías inferiores.
No digo que se elija un dibujo táctico y que se mantenga siempre. Digo que hay que definir una serie de principios futbolísticos y promoverlos desde la sub-15. Entre otras cosas, se debe definir si se va a jugar con laterales con proyección o con 3 o 4 centrales, si se va a jugar con doble 5, si se va a jugar con enganche, si se quiere un 9 grandote o un ataque de bajitos, si queremos un medio campo de dinámica o de control de la pelota. Como contraejemplo, pasamos de los laterales con proyección, mediocampo monopolizador de la pelota y 9 grandote del 06, a los cuatro centrales, medio campo de tránsito y ataque de bajitos en 2010. Una Selección sin identidad es lo que hoy somos.
Si la filosofía de juego de la mayor se incentiva desde los juveniles, nunca más deberíamos tener los problemas que tuvimos este Mundial; faltaron jugadores con oficio en buena parte de los puestos. Veamos. Tuvimos problemas serios o muy serios con el lateral derecho, el lateral izquierdo, el volante izquierdo y el volante derecho. Problemas en cuatro de los once puestos. Y no cuento a Demichelis porque fue sólo un problema de rendimiento por debajo del nivel esperado.
En particular, mi estilo de juego favorito es el de España, desde antes de este Mundial. En realidad, el juego de España está basado en el del Barcelona, equipo del que soy hincha desde chico. Creo que ese es el modelo a seguir. El Barcelona, justamente, aplica en sus inferiores la lógica de replicar el estilo de juego del primer equipo. El resultado ha sido una brutal abundancia de jugadores de altísima calidad, a tal punto que siempre juegan con 7 u 8 jugadores de inferiores. Esos jugadores, además, dan el salto de inferiores al primer equipo como si nada, porque lo único que se les pide es que hagan lo mismo que vienen haciendo desde chicos. Como ejemplos, Busquets y Pedro, titulares en la final de hoy, debutaron en la primera de Barcelona en el segundo semestre de 2008, con Guardiola. Joder.
En la misma línea, hay que devolver a las juveniles el rol de escuela de jugadores. No nos sirve el modelo Batista, de querer ganar títulos para postularse a cargos más importantes. Se necesita que los responsables de las inferiores formen laterales a lo Dani Alves o volantes a lo Xavi. Que formen jugadores, bah. Tienen la posibilidad de agarrar un chico en la sub-15 y tenerlo hasta la sub-20. No hay excusa para que con un modelo así a la selección mayor le falten especialistas en todos los puestos. Puede haber mejores o peores camadas de jugadores, pero no te puede faltar lateral o un carrilero de nivel… eso es así.
Otra cosa que creo que tenemos que entender es que ya no somos una selección sudamericana. Nuestros jugadores están todos en Europa. Rinden mucho más allá que en la Selección, lo que indica que se sienten mucho más cómodos jugando, entrenando y viviendo a la europea. Sí, somos una selección europea, es hora de asumirlo. Y de contratar un técnico que trabaje a la europea. Aunque haya que recurrir a un DT extranjero, algo que sé que es difícil de digerir para muchos. Si me dan a elegir, me quedo con Rijkaard, aunque sé que lo estarían matando al primer empate. Una opción más viable es Pochettino, hoy entrenador del Espanyol de Barcelona. Pellegrini también podría ser, pero acaba de firmar con Liverpool. Soy bielsista, pero Bielsa hoy es imposible.
Otra cosa. De los últimos 8 semifinalistas (06 y 10), 7 fueron europeos. Hay un mensaje que tenemos que entender; el fútbol a la sudamericana está quedando obsoleto. Donde más se nota es en la composición de los mediocampos… los sudamericanos tenemos los mejores defensores y delanteros, pero los europeos los mejores volantes. Xavi, Iniesta, Sneijder, Ozil, Muller, Schweinsteiger (admito que para este apellido copié y pegué), Gerrard, Gourcuff, Xabi Alonso, Cesc. Todos son europeos. Argentina tiene que aprovechar el trabajo en juveniles para formar esta nueva generación de mediocampistas, de buen toque, dinámica, capacidad de atacar y marcar. Hoy los volantes europeos, más que mediocampistas, son todocampistas. Por eso mandan en los partidos contra los equipos no europeos, con jugadores de funciones más recortadas. No es imposible formar jugadores de este perfil. En este momento se me ocurre que tipos como Mascherano, Banega, Bolatti o Pastore tienen las condiciones para ser volantes a la europea. Pero se formaron con otro tipo de exigencia, y hoy son básicamente especialistas. Mascherano es un fenómeno marcando, pero cuando Argentina tiene la pelota juega con 10, porque el tipo siente que su función es solamente marcar. Eso es un problema de formación, porque tiene condiciones técnicas para sumarse al toqueteo y llegar al ataque. Si no, mirar a Xabi Alonso, técnicamente mucho menos dotado que Masche.
En fin, su fuera Grondona encararía un proyecto de este estilo. En Argentina hay jugadores como para recuperar el prestigio que alguna vez tuvo la Selección, pero se necesita trabajo y modernización. Si si, como en tantas otras cosas.